5a PAPELETA: CONSULTA POPULAR, NO ELECCIÓN DE CONSTITUYENTES

5ª papeleta: consulta popular, 

no elección de constituyentes

ARCHIVO

El Siglo, martes 15 de mayo de 2018 

Es autoritaria porque la fórmula Varela está prefabricada y no admite participación en su construcción
La propuesta de Constituyente hecha por el Ejecutivo nos parece inconveniente, autoritaria y manipuladora.
Es inconveniente porque no sólo se plantea dentro de un proceso electoral en ciernes, sino que se hace en un momento de crisis política exacerbada producto del enfrentamiento de dos órganos del Estado: Ejecutivo –vs- Legislativo, cuando la convocatoria de la paralela significa precisamente el consenso de estos dos órganos estatales.
Es autoritaria porque la fórmula Varela está prefabricada y no admite participación en su construcción, por lo cual sólo pretende el aval de los sectores ‘consultados'. Y es que se requiere de un gran consenso nacional a la hora de elaborar una nueva Constitución, en tres momentos: uno, al decidir que se quiere una Constituyente; dos, al escoger a quienes redactarían el texto constitucional en nuestra representación; y, tres, al aprobarse la Carta Magna por referéndum.
En esta propuesta se parte de la ficción jurídica de que el Presidente y los diputados representan la voluntad popular, por lo tanto, pueden decidir si convocan a la Constituyente paralela en base a consultas parciales en una lista pre-elaborada a conveniencia. Pudiera afirmarse que el Presidente recibió el mandato popular en elecciones de 2014, de convocar a Constituyente, porque así figuraba en su Plan de Gobierno, pero en todo caso su compromiso era hacerlo en los primeros años y no en los últimos, por lo que es válida una consulta amplia al pueblo panameño, de si quiere o no una Constituyente, a través de una 5ª papeleta el 5 de mayo de 2019.
Las reglas del juego de selección de constituyentes no existen en la actualidad, por lo tanto, quedarían en manos del Tribunal Electoral, el cual expediría en una carrera contra el tiempo y según cánones de la partidocracia vigente, un Decreto para definir aspectos tan trascendentales como requisitos, incompatibilidades, postulación, forma de selección, campaña, financiamiento, etc, los cuales deberían establecerse a través de Ley como pasa con las elecciones nacionales, para posibilitar participación de los diversos actores políticos y sociales.
La propuesta del Ejecutivo es manipuladora porque busca dirimir la pugna de poderes, utilizando la figura de la Constituyente, colocándonos en un peligroso camino de clientelismo y anarquía política, vaciando de contenido una fórmula que, en condiciones de libertad y empoderamiento ciudadano, pudiera contribuir a resolver en gran medida problemas de institucionalidad democrática y convivencia pacífica.
Anayansi Turner
Abogada y docente universitaria

Comentarios

Entradas más populares de este blog

Acoso sexual en la UP

Elecciones: entre el clientelismo y la libre postulación

La abogacía y el examen profesional