¿IDEOLOGÍA DE GÉNERO?
¿Ideología de género?
El Siglo, martes 6 de marzo de 2018
El feminismo, entendido como teoría y práctica que promueve los derechos de las mujeres en condiciones de igualdad con los varones
En ocasión del Día Internacional de la Mujer, este 8 de marzo, haremos algunos señalamientos sobre cómo el feminismo y, concretamente, los estudios de género, han incidido en los avances de las mujeres.
El feminismo, entendido como teoría y práctica que promueve los derechos de las mujeres en condiciones de igualdad con los varones, tiene diversos desarrollos analíticos y se ha expresado en distintos movimientos reivindicativos.
Los estudios de género o con perspectiva de género se refieren a enfoques interdisciplinarios que tratan de ‘explicar las características, relaciones y comportamientos sociales de hombres y mujeres en sociedad, su origen y su evolución, destacando la existencia real del género femenino y masculino, sin dominio de uno sobre el otro, sin jerarquías y sin desigualdad' (Juana Camargo. ‘Género e Investigación Social', UNICEF-IMUP, Panamá, 1999). Los mismos se encuentran bastante extendidos en las universidades de todo el mundo y han enriquecido las investigaciones en ciencias sociales.
En el caso de Clara González, ella fue influida por el sufragismo norteamericano e inglés. Su feminismo estaba asentado en el principio de igualdad de derechos y en el mejoramiento de las condiciones morales de la mujer (incidencia del protestantismo en el sufragismo norteamericano). Su militancia en el Centro Renovación (1922), Partido Nacional Feminista (1923) y Unión Nacional de Mujeres (1944), junto con otras cóngeneres, permite la conquista de los derechos políticos para la mujer en 1945-1946 en Panamá, así como abolir normas discriminatorias hacia la misma.
En los últimos 30 años, el movimiento de mujeres en el país, los estudios teóricos feministas en la Universidad de Panamá, junto con aportes de diputadas en la Asamblea Nacional, han permitido avances legislativos importantes, como la Ley de Igualdad de Oportunidades y los que sancionan penalmente la violencia doméstica, la trata de personas, el femicidio y el acoso sexual.
No consideramos correcto que se banalicen estos esfuerzos –con sustentación académico científica- que se han concretado a costa de grandes sacrificios de mujeres a lo largo de la historia patria y de otras latitudes, acusándolos de ‘ideológicos'.
Las argumentaciones a favor y en contra del matrimonio igualitario deben estar construidas con base en la razón, la tolerancia y la convivencia pacífica, sin estigmatizaciones lacerantes y discriminatorias. Hay que profundizar en el debate respetuoso y de altura. Ya el Papa Francisco dijo: ‘¡Claro que eres hijo de la Iglesia!' (a un transexual español).
Abogada y docente universitaria
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