Todos somos Colón

El Siglo, martes 20 de marzo de 2018 -

Dicho Comité plantea entre sus principales demandas: la participación de los colonenses en la consulta

Los días martes 13 y miércoles 14 de marzo pasado, todo el pueblo panameño estuvo a la expectativa en torno al paro decretado por 48 horas por el Comité de Lucha por la Salvación de Colón, en esta provincia atlántica.

Dicho Comité plantea entre sus principales demandas: la participación de los colonenses en la consulta y seguimiento del Plan de Renovación Urbana, sin que éste afecte su calidad de vida; que se den soluciones de vivienda en el Casco de la Ciudad para personas de escasos y medianos recursos; elaborar y aprobar un Plan de Desarrollo Integral de la Provincia de Colón que incluya fuentes de trabajo para sus habitantes; incluir a los colonenses en el plan de soluciones a sus necesidades de inversión social, cultural, deportiva y de empleo; velar para que se cumpla con la infraestructura pública necesaria, como solución definitiva al problema de la aguas servidas, bombeo pluvial, así como con los compromisos adquiridos con la comunidad educativa (incluyendo los 15 millones prometidos al CRU-Colón UP).

Y es que el proyecto insignia de este gobierno, con un valor de 1,100 millones de balboas y en manos de las empresas CUSA-Odebrecht, despierta muchas suspicacias, no sólo por el involucramiento de esta última en actos de corrupción en toda la región latinoamericana, sino porque el sistema de drenajes de las calles y suministro de agua potable colapsaron totalmente en la última temporada lluviosa, a pesar de que el proyecto también debía significar ‘renovación total de la infraestructura urbana' y que ya tiene ‘el 68% de avance', según informan los propios contratistas; así como su dudoso interés en recuperar edificios históricos, como la casa Wilcox.

En la provincia con los mayores niveles de desigualdad por kilómetro cuadrado y con el mayor porcentaje de casas condenadas (65%) de todo el país, existe el temor fundado de que este Proyecto signifique la expulsión del Casco Antiguo de Colón, de los sectores más humildes, favoreciendo los negocios de especulación inmobiliaria en esta área de la ciudad, tal como aconteció con el Casco Antiguo de la ciudad de Panamá.

Tenemos fe en que prospere positivamente el diálogo de las fuerzas vivas colonenses con el gobierno nacional. Recuerden que los ojos del país están puestos en el mejor desenlace del conflicto, ya que, ¡todos somos Colón!

Anayansi Turner

Abogada y docente universitaria