Precariedad laboral en pandemia

El Siglo, martes 26 de mayo de 2020 

Resulta preocupante la situación laboral que se ha generado tras la pandemia

Resulta preocupante la situación laboral que se ha generado tras la pandemia, que ha llevado a una mayor precariedad económica a amplios sectores de la población, sin que el gobierno haya podido hacerle frente de la manera más adecuada.

El cierre temporal de las empresas y la cuarentena implicaron la paralización de labores del sector privado, con excepción de algunas dedicadas a servicios esenciales.

El teletrabajo, legalizado días antes de haberse producido el primer caso de coronavirus, permitió a gran cantidad de funcionarios públicos a seguir trabajando y, a algunas empresas, desarrollar ciertas actividades de modo virtual.

Sin embargo, cerca de 200,000 trabajadores vieron suspendidos sus contratos de trabajo por caso fortuito o fuerza mayor, en virtud del Decreto Ejecutivo No 81 de 2020 (sin obligación de laborar ni pagar salarios pero conservando su puesto de trabajo). A cambio, el gobierno se comprometía a asistirlos a través del vale digital (B/ 80), que se le hizo efectivo transcurridos casi 2 meses después de declarado ese cierre temporal.

Está claro que la pandemia no es causal de despido justificada, pero no dudamos de que haya existido un alto número de empresas que haya acudido al despido, aprovechando las circunstancias.

El Ejecutivo inauguró el 1º de mayo, la Mesa Económica laboral, con la participación de representantes gubernamentales, sindicales y de empleadores, con el fin declarado de reimpulsar la economía y generar empleos, que concluye en 2 meses. No obstante, con pocos días de funcionar, el gobierno expidió el Decreto Ejecutivo No 96, que hace posible la reducción de jornadas y, por ende, de salarios, al momento de retornar al trabajo, con la reapertura, haciéndole concesiones al sector empresarial.

De otra parte, el empresariado ha expresado su intención de que se ‘flexibilice' aún más el Código de Trabajo, agravando las condiciones laborales de los trabajadores.

La propia ministra de Trabajo ha calculado que el desempleo aumentará a un 14 a 20%, aparte de incrementarse la informalidad laboral, la cual equivalía al 45% de la PEA antes de la cuarentena.

Lo importante debió ser, como lo ha dicho la OIT, que en este momento de pandemia se evitasen las pérdidas de empleos y se mantuviesen los niveles de ingresos, tal como ocurrió en Rusia y Francia, con la figura de 2 meses de vacaciones adelantadas subsidiadas por la empresa privada y el Estado.

ANAYANSI TURNER

ABOGADA Y DOCENTE UNIVERSITARIA