Por la democratización de la postulación a los cargos de elección popular

El Siglo, martes 18 de septiembre de 2018 

Se ignora el profundo descontento y repudio popular al ‘status quo' político, apuntalado por la partidocracia imperante

Sectores políticos y empresariales evaden múltiples problemas generados por la crisis institucional y de representación política imperante, al plantear reformas parciales a la Constitución Política, tal como aconteció con la reciente propuesta de la Cámara de Comercio, Industrias y Agricultura, de modificar apenas 6 artículos de la misma, relativos a la forma de selección de Magistrados de la Corte Suprema de Justicia.

Se ignora el profundo descontento y repudio popular al ‘status quo' político, apuntalado por la partidocracia imperante, situación que ha llevado a la población a levantar como respuesta, la ingeniosa bandera de la NO REELECCIÓN.

Sin embargo, la llamada ‘libre postulación' a todos los cargos de elección y la rebaja del porcentaje de adherentes requerido para inscribir a un partido (del 4 al 2%) reconocidas por el Código Electoral no satisfacen las expectativas de auténtica participación de los panameños.

La libre postulación tiene tantas restricciones, que ha conducido al absurdo de que quienes califican en los 3 primeros lugares son miembros de partidos políticos o afines a éstos; amén del escuálido financiamiento.

Los partidos pequeños han sido históricamente adláteres de los 2 ó 3 partidos grandes. Estos últimos no se distinguen entre sí por su ideología o programa político, sino por el dueño o los intereses clientelistas a los cuales sirve; se han alternado el poder en los últimos 30 años y han realizado ‘pactos' de gobernabilidad traducidos en la práctica en pactos de impunidad.

Somos del criterio de que sólo a través de una real Asamblea Constituyente se podrán lograr mecanismos de democracia participativa, como lo serían las postulaciones a cargos de elección popular, por parte de ciudadanos independientes (no inscritos en partidos), agrupaciones ciudadanas, movimientos políticos y organizaciones indígenas, tal como lo permiten las Cartas Magnas de Colombia y Bolivia; y en el caso de las comunidades indígenas, escoger sus candidatos, según sus normas de democracia comunitaria (cfr. Fallo de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, Awas Tingni –vs- Nicaragua).

Anayansi Turner

Abogada y docente universitaria