EL FUTURO DEL TRABAJO

El futuro del trabajo




El Siglo, martes 9 de abril de 2019 
En el marco de celebración de los 100 años de la OIT existe gran preocupación por parte de este organismo acerca de lo que deparará el devenir en ...
En el marco de celebración de los 100 años de la OIT existe gran preocupación por parte de este organismo acerca de lo que deparará el devenir en el mundo del trabajo.
Y es que con la cuarta revolución tecnológica en ciernes (robótica e internet de las cosas), podrán desaparecer 5 millones de puestos en los 15 países más industrializados del mundo, y ni hablar del mundo subdesarrollado.
David Ritter, director ejecutivo de Greenpeace Australia/Pacífico, ha dicho que: ‘El futuro del empleo estará hecho de trabajos que no existen, en industrias que usan tecnologías nuevas, en condiciones planetarias que ningún ser humano jamás ha experimentado' (BBC, News Mundo, 12/X/16).
Francisco López Segrera, en reciente Conferencia en la Universidad de Panamá, dio ejemplos de puestos de trabajo para el 2030, que no hay en la actualidad, como: técnicos en robótica, banqueros de dinero alternativo, despachadores de drones, hackers del tiempo, escritores de wikis, etc.
Por lo anterior, la OIT encomendó a una ‘Comisión Mundial sobre el Futuro del Trabajo', confeccionar un Informe acerca de cómo garantizar en el futuro cercano y de manera amplia, empleo decente y sostenible, a pesar de estas grandes transformaciones tecnológicas. El mismo fue presentado en Ginebra el 22 de enero pasado y será debatido en la Conferencia Internacional del Trabajo en junio de este año, por representantes de gobiernos, empresas y sindicatos de todo el mundo.
El documento propone un programa consensuado por los diversos actores sociales, que haga énfasis en 3 aspectos básicos: 1) Aumentar la inversión en las capacidades de las personas, innovandónos y adaptándonos a los cambios permanentemente; 2) Ampliar la inversión en las instituciones del trabajo; 3) Incrementar la inversión en el trabajo decente y sostenible, conforme la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible de la ONU. La idea es que la inteligencia artificial esté bajo control humano; que haya una garantía laboral universal; que las plataformas digitales respeten derechos y ofrezcan protección al trabajo de las personas; que se garantice el aprendizaje a lo largo de toda la vida; y que se amplié la soberanía del trabajador sobre su tiempo.
La gran disyuntiva sería: ¿O la tecnología desplaza definitivamente al ser humano incrementando las desigualdades sociales; o está a su servicio, significándole mejor calidad de vida?
¿Estarán los candidatos presidenciales pensando en estos grandes retos que se nos vienen encima?
Anayansi Turner
Abogada y docente universitaria

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