Cuentos de hadas o cambio decisivo en el modelo consumista depredador

El Siglo, martes 1 de octubre de 2019 

‘Estamos en el comienzo de una extinción masiva y de lo único que pueden hablar es de dinero y cuentos de hadas de crecimiento económico eterno'

‘Estamos en el comienzo de una extinción masiva y de lo único que pueden hablar es de dinero y cuentos de hadas de crecimiento económico eterno. ¿Cómo se atreven?'. Con estas palabras, Greta Thunberg cuestionó a los gobiernos del orbe en la sede de Naciones Unidas, el 23 de septiembre pasado.

No cabe duda que la energía basada en los residuos fósiles ha sido el motor de la era de la industrialización, que ha permitido enorme acumulación de riquezas, pero no así su distribución equitativa, y ahora nos coloca al borde de la desaparición del planeta.

Pero ésta es apenas la punta del iceberg. El modelo consumista depredador es el que está detrás de la energía no renovable y altamente contaminante. 100 multinacionales son responsables del 71% de la emisión de gases de efecto invernadero; la industria de la moda y el calzado, el 8%; la aviación comercial el 2%; el sistema global de alimentos, el 24%, del cual la producción de carne genera el 14.5%.

Los expertos han señalado que existen la tecnología y los recursos necesarios para hacerle frente al cambio climático, y se va generando una creciente conciencia ecológica en la población.

Sin embargo, a nivel de los gobiernos, 77 prometieron detener las emisiones de CO2 totalmente para el 2050 y disminuirlas en 45% para el 2030, en la pasada Cumbre Climática de la ONU, pero los mayores países contaminantes no lo hicieron y EU se salió del Acuerdo de París en el 2017. Falta ver si podrá haber compromisos sustanciales del sector productivo.

Preservar el ambiente es un problema de todos. No sólo hay que cambiar el modelo consumista depredador que favorecen los políticos interesados sólo en su lucro personal, así como vigilar a los gobiernos en el cumplimiento de sus promesas, sino que, parafraseando a Gandhi, debemos ser el cambio que queremos ver en el mundo.

Hay que contribuir a la sostenibilidad ambiental a nivel personal, lo cual implica hacer parte de nuestra vida diaria: el ahorro de energía; el mayor uso del transporte público; reciclar, reducir y reutilizar permanentemente; informar y educar a los demás; exigir una baja huella de carbono en todos los productos de consumo; y plantar muchísimos árboles, siguiendo el ejemplo de Chico Mendes, Wangari Maathai, Jadav Payeng, Sebastiäo Salgado, Berta Cáceres y mucho otros.

ANAYANSI TURNER

ABOGADA Y DOCENTE UNIVERSITARIA