No al intervencionismo militar de EU en Darién
No al intervencionismo militar de EU
en Darién
La difusión de esta noticia coincidió con la donación de 63 vehículos militares valorados en $5 millones de dólares
La divulgación de la información que se dio a través de NBC News, de que existe presión en la administración Biden para que el Pentágono envíe tropas militares a Darién, con el objetivo de “ayudar a las autoridades locales a frenar el contrabando de drogas, el tráfico de personas y la inmigración”, encendió las alarmas en todo Panamá, en torno a una posible intervención militar estadounidense y, por ende, la remilitarización del país.
La difusión de esta noticia coincidió con la donación de 63 vehículos militares valorados en $5 millones de dólares, más $3 millones en repuestos, realizada por el Ministerio de Defensa de Estados Unidos, al Ministerio de Seguridad Pública panameño, el pasado 25 de mayo de 2023, para operaciones de contraterrorismo, antinarcóticos, contra el crimen organizado, operaciones marítimas y fronterizas en áreas apartadas del país.
Ya en el 2021 se había anunciado la conformación del Centro Regional de Operaciones Aeronavales (CROAN) y la Fuerza Marítima Conjunta (FMC), a partir de una Carta de Entendimiento entre el MINSEG y la Embajada, con el supuesto propósito de combatir el narcotráfico, crimen organizado y pesca ilegal, a través de una plataforma de coordinación regional.
En esta misma dirección recordamos que una veintena de acuerdos fueron firmados por ambas naciones después de la invasión norteamericana a Panamá de 1989, violatorios de nuestra soberanía; y, uno de ellos, el Arias Hinton de 1991, fue complementado con el Salas-Becker de 2002, que permite el “apoyo y asistencia” por parte del Servicio de Guardacostas norteamericano al Servicio Nacional Aeronaval, sin haber pasado ninguno de ellos por aprobación de la Asamblea Nacional, tal como prescribe la Constitución Política con respecto a los tratados o convenios internacionales.
Asimismo, nuestra Carta Magna, desde las reformas constitucionales de 1994, establece que nuestro país no tiene ejército, sino servicios de policía con mando y escalafón separados bajo el mandato del Presidente de la República (artículo 310). Por otro lado, el Tratado de Neutralidad del Canal de Panamá prohibe literalmente la presencia de fuerzas militares extranjeras en nuestro territorio (artículo V).
Ahora, EU intenta aprovecha la debilidad institucional (incluyendo la de los estamentos de seguridad para controlar el flujo migratorio), para una nueva presencia militar norteamericana en el país, con objetivos geoestratégicos, violando nuestra Constitución y el Tratado de Neutralidad.
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